Es muy importante preparar la piel antes de maquillarla, yo diría que es hasta obligatorio, porque eso es lo que va a marcar la diferencia entre un maquillaje impecable y duradero; y otro con mal aspecto y nada favorecedor.
Muchas mujeres se maquillan habitualmente, aunque cada vez hay más hombres coquetos como tiene que ser, pero no todas se toman el tiempo necesario para realizar una rutina facial adecuada. Os voy a contar un secreto…ya podéis comprar los productos de maquillaje más caros del mundo que si no preparáis bien la piel antes de aplicarlos, nunca conseguiréis los resultados que esperáis y, lo que más duele, habréis tirado el dinero a la basura.
Tened en cuenta que maquillar una piel sin preparar es como querer pintar un cuadro en un lienzo que ya está usado.
En el post de hoy vamos a ver cuál es el tipo de preparación que debemos darle a nuestro rostro antes de maquillarlo. Es un proceso que debemos hacer siempre, da igual si previamente estamos maquilladas o es por la mañana y nos acabamos de levantar.
Los pasos a realizar son muy sencillos pero es fundamental que en cada uno de ellos usemos productos específicos y adecuados a nuestro tipo de piel (seca, normal, mixta o grasa).
Una vez aclarado todo ésto……¡¡¡vamos a empezar!!!
Paso 1: LIMPIAR
La limpieza del rostro es un paso muy importante porque conseguimos eliminar restos de maquillaje que hayan podido quedar, así como toxinas, suciedad e impurezas acumuladas en nuestra piel. Con este sencillo gesto impedimos que los poros se abran, debido a la acumulación de grasa y suciedad, y que se formen granos. No olvidemos que la limpieza diaria también ayuda a remover y eliminar las células muertas de la superficie del rostro, con los beneficios que eso conlleva.
Hay un montón de productos en el mercado que nos pueden ayudar en esta tarea: agua micelar, leche limpiadora, bálsamo, gel limpiador,…, sólo hay que elegir la textura y el producto que más se adecúe a nuestro tipo de piel.
Paso 2: TONIFICAR
Después de la limpieza debemos continuar aplicando un tónico. Elimina los restos de impurezas, calma la piel, cierra los poros y, como su nombre indica, tonifica la piel y la deja preparada para el siguiente paso.
Al usar un producto para cerrar los poros, como es el caso del tónico, evitamos que se acumule suciedad con tanta facilidad y que la piel luzca bien durante más tiempo.
Es recomendable usar tónicos astringentes en pieles de normales a grasas y tonificantes en pieles sensibles o secas.
Paso 3: HIDRATAR
Los pasos que hemos visto hasta ahora son importantes y necesarios pero la hidratación es quizás el más importante, imprescindible, fundamental y obligatorio de todos ellos para tener una piel saludable y que el acabado de nuestro maquillaje sea el que deseamos.
Como ya he aclarado en los pasos anteriores, y lo vuelvo a hacer porque es esencial, la hidratante que usemos debe ser específica y adecuarse perfectamente a nuestro tipo de piel y a sus necesidades.
Por supuesto, la zona de alrededor de los ojos requiere una atención y cuidado especial porque es muy delicada. Por ello, es importante usar un buen contorno de ojos que aporte un extra de hidratación y firmeza a la piel de esta zona.
Para terminar, pero no menos importante, tampoco debemos olvidarnos de aplicar protección solar durante todo el año y a diario.
Son tres pasos muy sencillos y básicos que, una vez lo incorporéis en vuestra rutina, veréis que no se tarda tanto tiempo en realizarlos y que los beneficios para la piel son innumerables, además de conseguir que el maquillaje luzca impecable durante todo el día.
♥ HASTA EL PRÓXIMO!!!!!!
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